Los griegos fueron los primeros en nombrar a algunas de las estrellas y constelaciones con nombres de su prolífica mitología. Esta costumbre de nombrar las estrellas y las constelaciones con nombres de dioses y héroes de la mitología llegó hasta el Renacimiento. Ya en el siglo XX las notaciones numéricas sustituyeron esta tradición.
En el video podrás conocer la leyenda de Orión, un mito clásico que sirve para nombrar una de las constelaciones más bonitas del hemisferio norte.